¿Qué es la artrosis de rodilla?
La artrosis de rodilla es una enfermedad degenerativa crónica que afecta a la articulación de la rodilla. Esta enfermedad se caracteriza por la destrucción progresiva de la cartílago articular que recubre los extremos de los huesos de la rodilla, lo que provoca dolor, inflamación y rigidez en la articulación. Esta patología puede afectar a personas de cualquier edad, aunque es más común en personas mayores de 45 años.
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Causas de la artrosis de rodilla
Existen varias causas que pueden contribuir a la aparición de la artrosis de rodilla, entre ellas se encuentran:
- Lesiones en la rodilla, como las fracturas, esguinces o desgarros musculares.
- Enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide.
- Uso excesivo de la articulación.
- Presencia de defectos congénitos en la articulación.
- Sobrepeso u obesidad.
Síntomas de la artrosis de rodilla
Los principales síntomas de la artrosis de rodilla son:
- Dolor: el dolor es uno de los síntomas más comunes de esta patología. Suele ser un dolor sordo y profundo, que se intensifica con el movimiento de la articulación.
- Rigidez: los pacientes con artrosis de rodilla suelen experimentar rigidez en la articulación.
- Inflamación: la articulación suele estar hinchada debido a la inflamación producida por el daño articular.
- Pérdida de la movilidad: a medida que avanza la enfermedad, los pacientes pueden experimentar una pérdida progresiva de la movilidad de la rodilla.
Tratamiento para la artrosis de rodilla
El tratamiento para la artrosis de rodilla debe estar enfocado a aliviar los síntomas y mejorar la función de la articulación. Algunas de las opciones de tratamiento son:
Fisioterapia
La fisioterapia es un tratamiento muy efectivo para la artrosis de rodilla. El objetivo de la fisioterapia es mejorar la movilidad de la articulación, aliviar el dolor y reducir la inflamación. Los fisioterapeutas suelen utilizar técnicas como el masaje, la terapia manual, la estimulación eléctrica y los ejercicios de movilización para tratar la artrosis de rodilla.
Cirugía
En algunos casos, la cirugía puede ser necesaria para tratar la artrosis de rodilla. La cirugía puede ser utilizada para reparar o reemplazar la articulación dañada. Esta opción de tratamiento es recomendada para pacientes con una artrosis de rodilla avanzada o con dolor severo.
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Medicamentos
Los medicamentos como los antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) y los analgésicos pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación de la artrosis de rodilla. Los medicamentos recetados por el médico pueden ser necesarios para controlar el dolor y la inflamación.
Prevención de la artrosis de rodilla
La mejor forma de prevenir la artrosis de rodilla es mantener un peso saludable y hacer ejercicio regularmente. El ejercicio ayuda a fortalecer los músculos de la rodilla, lo que reduce la presión sobre la articulación y mejora la movilidad. Además, el ejercicio también puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación.
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